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La mermelada que nunca llegó

Sigo pensando que en cualquier momento me llamarás y me dirás que no quieres dejarlo con voz angustiada, como la última vez. Pero sé que no lo harás, porque ahora he comprendido que cuando te enamoraste de mi, te enamoraste de alguien que no era yo.

Pensaste que era perfecta, que sería una persona segura de sí misma, que suplementaría tus dificultades y que no sabía lo que era el miedo ni la ansiedad. Pero soy imperfecta, paso miedo, dudo y soy insegura. A pesar de todo eso soy valiente y no me amedrento con las cosas sigo adelante y lucho como la que más, aún con miedos y ansiedad.
Delante de tus imperfecciones, que no son pocas, las relativizaba, les daba la importancia justa y aún así quería seguir a tu lado. Ahora ya no Nito. No puedo estar con alguien que no me valora, que no se interesa por mi, ni por mis emociones y que lo único que hace es engrandecer mis debilidades y mirarse una y otra vez el ombligo.

Aunque te parezca mentira, te he querido con locura como nunca antes había querido, sí aunque no te lo creas. Y me encantará seguir recordando como me abrigabas cuando te ibas por la mañana y como me despertabas los domingos como un niño pequeño al que solo le faltaba saltar en la cama.

La mermelada? de Arándanos joder, de Arándanos!!


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