Estamos de camino a una gran caída, un gran porrazo, quizá vayamos hacia el final de nada sin darnos cuenta. O mejor, quizá avancemos hacia algo consistente pero flexible a la vez, un gran colchón. Vamos muy despacio, avanzamos muy lentamente. Pero no se sabe hacia qué, bueno en verdad, prefiero no saberlo. Tampoco nadie sabe que pasará mañana.
Pero no puedo dejar de preguntármelo, de darle vueltas. Me faltan cosas. Creo que me faltan llamadas, me faltan e-mails, me faltan mensajes, me faltan besos, me faltan abrazos. Creo q falta iniciativa. Lo malo es que me faltan esas mismas cosas que yo no hago, que yo no doy. Y hay una frase que dice que “el que quiere recibir tiene que empezar dando”.
Ese es el gran problema, que cuesta dar. Prefiero mantenerme en mi coraza, de fuerza, de indiferencia, de no hay dolor, de no hay sentimientos, de no hay interés, de me da igual, de así no sufro, de tú por aquí yo por allí. Sin embargo, esta coraza creo que lo único que hace es distanciarme más de lo que tengo o quisiera tener cerca algún día.
Quizá todo se base en querer dar, en ese pequeño salto de fe. En los detalles, en esos pequeños momentos que puedes regalar.
Quién sabe, puede que otra vez más, le haya hecho sitio a mi mala suerte y a mis ganas de acertar. Algún día nos reiremos de esto tomando una taza de te.
Pero no puedo dejar de preguntármelo, de darle vueltas. Me faltan cosas. Creo que me faltan llamadas, me faltan e-mails, me faltan mensajes, me faltan besos, me faltan abrazos. Creo q falta iniciativa. Lo malo es que me faltan esas mismas cosas que yo no hago, que yo no doy. Y hay una frase que dice que “el que quiere recibir tiene que empezar dando”.
Ese es el gran problema, que cuesta dar. Prefiero mantenerme en mi coraza, de fuerza, de indiferencia, de no hay dolor, de no hay sentimientos, de no hay interés, de me da igual, de así no sufro, de tú por aquí yo por allí. Sin embargo, esta coraza creo que lo único que hace es distanciarme más de lo que tengo o quisiera tener cerca algún día.
Quizá todo se base en querer dar, en ese pequeño salto de fe. En los detalles, en esos pequeños momentos que puedes regalar.
Quién sabe, puede que otra vez más, le haya hecho sitio a mi mala suerte y a mis ganas de acertar. Algún día nos reiremos de esto tomando una taza de te.
"no hagas a los demás, no lo que no quieres que te hagan a tí" ... otra frase, que también vale su peso en oro, en estos tiempos que corren.
ResponderEliminarQue pases un buen verano Olga!
"Lo que das, te lo das. Lo que no das, te lo quitas".
ResponderEliminarBesos y abrazos desinteresados para que te animes a querer dar un poquito.
Me gusta lo que escribes. Es bonito. :)